martes, 31 de diciembre de 2013

2013

No suelo escribir nada en fin de año, nunca. Ni balances de lo bueno y lo malo...ni deseos, ni felicitaciones. Nada. Pero este año va a ser una excepción.

2013 por lo general ha sido un año normal, con sus cosas buenas y sus cosas malas. Conseguí mi titulo de técnico en telecomunicaciones, conseguí meterme en el grado superior y acabar el primer trimestre vivo e ileso. A pesar de los virus y la enfermedades varias que he pillado y que muchos solemos pillar...el balance ya era positivo. No obstante, por si no fuera lo suficientemente positivo, he de señalar una acontecimiento importante. El 8 de agosto mi vida cambió más de lo que cabria imaginar. Desde aquel día tengo a una persona increíble en mi vida y que no pienso soltar en lo que me queda de esta. 2013 va a quedar señalado, probablemente mas de lo que pueda quedar señalado en otras personas. Las mejores cosas de este año han sucedido gracias/con esta persona. ¿Y por que llamarla "persona"? estoy hablando de Sheyla Sancho Martin, o Sheymorphine para algunas personas. Apareciste poco mas de a mitad de año, pero este poco menos de medio año que he vivido contigo, ha sido maravilloso. Lo mejor es pensar en los años que están por llegar, las cosas que haremos y veremos; lo que reiremos y lloraremos; lo que viviremos y sufriremos. No hay que engañarse, no todo va a ser fácil en esta vida, pero contigo estoy dispuesto a afrontar lo que haga falta.
No voy a olvidar a las personas que han estado conmigo en las buenas y en las malas. Que allí seguirán para mi y yo para ellos.

Feliz año a todos.

Recordad: La vida es larga si se vive bien, y uno solo se hace viejo cuando comienza a mirar hacia atrás.
Mirad hacia adelante.

La carta

Sé que ya te he dedicado muchos textos, sé que todos acaban diciendo lo mismo al fin y al cabo, ¿pero eso importa?
Vamos a empezar por intentar expresar lo que eres para mí, pero empecemos por algo físico. Si, lo superficial primero, ya que es por donde se empieza… y ya se irá profundizando:
Todo empieza una tarde soleada de Junio. ¿Quién iba a decir, por aquel entonces, la importancia de aquel momento? Ese momento en el que entré en casa de una amiga y vi una chica al fondo del salón. El pelo oscuro, largo, liso y lacio que incitaba al deseo de tocarlo y dejar que se deslizara entre los dedos. Esos ojos grandes, claros y brillantes. Dos perlas relucientes de azul aguado que miraban con esa intensidad seductora de la que jamás me olvidaré. Ese rostro fino, hermoso y bello, imposible de ser esculpido, dibujado o expresado con tanta perfección como la que posee. Una chica preciosa, sin duda, probablemente inalcanzable. Eso fue lo que único que lograba ver en aquel momento, su rostro. Solo recuerdo el azul de su ropa por lo bien que conjuntaba con sus ojos, pero lo demás era borroso. No lo podía evitar, le soltaba miradas, era difícil estar más de cinco segundos sin verla. ¿Qué me estaba haciendo? No era propio de mí, mi corazón estaba muy lejos, demasiado lejos para sentirlo. No podía pasar por alto eso que estaba pasando, y de alguna manera, no recuerdo cual, hablé con ella. Una conversación breve, superficial, pero no podía ser más perfecta. ¿Y ese dolor cuando se marchó? Me sentía ridículo, pensaba que estaba haciendo el ridículo. Para ella era un chico más del montón que conoce una tarde cualquiera y pasa a su lado como una leve brisa que transcurre sin hacer meya en su piel ni en su corazón. ¿Y que esperaba? No se habría fijado en mí, y de haberlo hecho… ¿Qué corazón le podría haber entregado?
Pasó el tiempo, y acabo siendo lo que parecía estar predestinado a ser, una chica que conoces una tarde de verano y con la que apenas intercambias palabras. Bueno, uno se puede acostumbrar después de tantas cosas. Pero decidí hacerme notar de vez en cuando, ¿y por qué no? ¿Lograría llamar su atención? No me quedaría tranquilo si no lo intentaba. No fue precisamente efectivo, se reconocer los fracasos, no me iba a ganar el corazón de aquella chica.
Pero el destino tiende a dar cambios repentinos. Puede volver atrás y darte otra oportunidad, o así es como lo interpreté. Años después la volví a ver, y aun que mi corazón yacía lejos y destrozado…una parte de él gritaba a lo lejos: “¡Ella, es ella, no puedes dejarla escapar! ¡Ella me devolverá a la vida!” Era difícil de creer, pero una fuerza mayor que mi voluntad se apoderó de mí, y me hizo hacer cosas que jamás habría hecho. Cosas tan sencillas como mirarla una tarde cualquiera, y quedarme embobado, como si en esa imagen hubiera visto mi vida entera. Una señal tras otra me dejé llevar. Elegí ese camino contra todo pronóstico. Mi corazón luchó contra mi voluntad, y mi corazón ganó. Gracias a él gane el suyo al robarle un beso en el que dije todo lo que pensaba, y lo que pensaría desde aquel momento en adelante. Un beso en el que sellé algo más que un amor incondicional, sellé lo que era un compromiso para cuidarla, hacerla feliz; costara lo que me costara, porque era lo que quería, era lo que necesitaba, era la razón por la que soy y existo. Soy un chico con el corazón destrozado que ha querido soñar y vivir, vivir el sueño. Ella es el bálsamo de mis heridas, mi morfina. Nunca podré desengancharme de ella. Mi corazón se sustenta de su esencia, y se mantiene a flote gracias a sus sonrisas. Jamás podré agradecerle lo que hace por mí, jamás podré darle las gracias como se merece. Por eso lo compensaré haciendo de su vida un sueño hecho realidad, aunque sea todo lo que haga…aunque sea lo último que haga.


Feliz Navidad y próspero año, espero que tus deseos se hagan realidad y vivas tu vida con felicidad.
Gracias por todo cielo.
Te quiero se queda corto…
Te amo.



domingo, 8 de diciembre de 2013

Ella

¿Que decir cuando sobran las palabras? ¿y cuando éstas ya no son suficientes para expresar lo que sientes? Entonces te pierdes en la profundidad de su mirada, esa mirada que lo dice todo, esa mirada que no quieres olvidar jamas, esa mirada intensa de la que jamás querrías desprenderte. ¿Que haces entonces? la abrazas como si no hubiera mañana, como si ese abrazo fuera el ultimo, como si su vida dependiera de ello. No puedes parar de mirarla, de acariciarla, de besarla; es una necesidad, la droga, mi droga. Oír su voz, ver su nombre, cualquier cosa hace que te estremezcas, cualquier cosa de ella...
...y cuatro meses después todo es mas intenso; y entonces lo sabes, estas cada vez más seguro, es ella. Ella lo es todo. Ella es mi presente y futuro. Ella es mi vida.

lunes, 18 de noviembre de 2013

Andares de la tierra

“Cuatro fueron, y cuatro serán, los grandes brujos de Ajmernion. De oro, bronce, plata y plata negra resplandecían sus colgantes, y en ellos la magia latía constantemente. Las gemas incrustadas, el brillo imperecedero, el tacto sólido y frio del corazón de los brujos eternos. Su magia poderosa, tan grandiosa que en codicia uno cayó. En muerte y destrucción el mundo asoló. Bajo la luz de una nueva Era, en su colgante se confinó, y bajo el amparo de la magia este residió.”

Ethzan Kelishtof, escritor de Phyrelion.
Fragmento de “Andares de la tierra”.
Año 28 de la segunda Era.

martes, 12 de noviembre de 2013

Amor

El amor no se puede definir, ni se debería intentar. Es diferente en cada persona, es algo inexistente, algo psicológico, buscarle sentido es como buscarle el sentido a la vida. El amor a una persona, sin embargo, es otra cosa. Es notar que por ella sacarías fuerzas de donde nos las tienes, es el impulso mas fuerte y el deseo mas ferviente. No hay lógica, no hay razón, ni mucho menos sentido. En el amor las locuras están al orden del día, pero para una persona enamorada dejan de ser locuras. En asuntos de amor, los locos son los que tienen mas experiencia. De amor no preguntes nunca a los cuerdos; los cuerdos aman cuerdamente, que es como no haber amado nunca.

lunes, 21 de octubre de 2013

Idílico deceso

“Alzado, cual espada de caballero impávido hacia el firmamento eterno. Claudicado, cual sangre del hombre postrado ante la muerte. Solo dos aptitudes coexisten en la conflagración. Solo dos alternativas para la subsistencia. La empírica entereza de un hombre se manifiesta cuando, una vez claudicado, aún sigue alzando la espada al eterno firmamento”

Horrew Freih, dramaturgo de Eclastion.
Fragmento del “Idílico deceso”
Año 324 de la segunda era.

jueves, 3 de octubre de 2013

Eclastion

“Tres montañas los dioses erosionaron. Tres montañas las criaturas escarparon. Tres montañas los hombres encontraron. Altas murallas de solida roca se alzaron, y a tres alturas se levantaron para su cobijo y protección. El reflejo del cielo sobre las montañas, bajo el fulgor de las estrellas, las innumerables antorchas representaban. La sangre derramada de los antepasados mancharon los estandartes del gran castillo, y con pequeños filamentos de oro, en estos se inmortalizaron. Siempre la llama encendida, siempre el vigía en la torre más alta. La primera ciudad de los hombres de Ajmernion. Tan antigua es como su magnitud, y tan poderosa es como su prosperidad.”

Ecstelion I, primer rey del reino unificado de los hombres.
 “Ciudad de Eclastion; la ciudad roja.”
Año 136 de la primera era.

martes, 24 de septiembre de 2013

Lamento de los Rohirrim

"¿Dónde están ahora el caballo y el caballero? ¿Dónde está el cuerno que sonaba?
¿Dónde están el yelmo y la coraza, y los luminosos cabellos flotantes?
¿Dónde están la mano en las cuerdas del arpa y el fuego rojo encendido?
¿Dónde están la primavera y la cosecha y la espiga alta que crece?
Han pasado como lluvia en la montaña, como un viento en el prado;
los días han descendido en el oeste en la sombra de detrás de las colinas.
¿Quién recogerá el humo de la ardiente madera muerta,
o verá los años fugitivos que vuelven del mar?"
 
 
-Aragorn, citando un poema de Rohan sobre su fundador, Eorl el Joven.

domingo, 8 de septiembre de 2013

Mi salvadora

He escrito mi vida amorosa infinidad de veces. Nunca ha sido bonita, no; tuvo sus momentos, pero al hacer balance te das cuenta de que es negativo. Puñaladas tras otras, he ido dando tumbos hasta caer en el regazo de ella. Estas tan convencido de que tu corazón esta muerto, que, al verla, sientes que quiere despertar de nuevo. Estas tan acostumbrado a no sentir, que aquello rompe todos tus esquemas y la confusión te domina. ¿Qué es esto?, ¿qué me pasa?, no es la primera vez que siento esto. Por supuesto, al principio es difícil discernir lo que esta pasando. Una parte de ti quiere dejarse llevar, pero la otra, automáticamente se pone a la defensiva. Imagino que es normal, dado el historial. Poco a poco te dejas llevar por lo que tu interior quiere. Eso es sencillo, haz lo que sientas sin pensártelo dos veces. Aquel impulso hace un mes lo cambió todo. Fue extraño y desconcertante al principio, pero era lo que mi corazón quería. Y así es como ella entro en mi vida: una luz al final de un sendero oscuro, un bálsamo sobre una piel irritada, una razón para sonreír. Por que es cierto, sueles sonreír al ver algo gracioso, al oír un chiste...¿pero sonreír al ver su mirada? Eso es magia. ¿Que verla, tocarla y besarla se convierta en una necesidad? Eso es adicción. ¿Qué pasarte el resto de tu vida con ella, y hacer todo lo imaginable a su lado se convierta en tu deseo? Eso es amor.

¿Qué conclusión se puede sacar de esto?

Que ella me ha salvado, me ha sacado de ese pozo metafórico de desamor en el que caí y pensaba no poder salir. Ella me ha sacado con tanta facilidad que...¿cómo ignorarlo? Pero hay una conclusión mas sencilla sobre todo esto: Te quiero, eso lo sé, es lo que siento ahora y sentiré siempre, por que siempre te querré de todas las formas posibles. Nunca se quiere de la misma manera, eso lo aprendí hace mucho, pero lo mas imporante es ese sentimiento que hizo brotar todo lo demás, esa chispa que repiquetea inagotable e imperecedera y alimenta la llama. Ya eres la mitad de mi vida; tarde o temprano mi vida será mas tuya que mía, pero no me da miedo, se que he elegido bien, algo en mi interior me lo dice.

Te quiero.

miércoles, 28 de agosto de 2013

El último Samurái

 - Dígame cómo murió
   - Os diré cómo vivió.
 

Understand

Tal vez algún día lo entienda, mientras tanto, mi realidad esta impregnada con la irrealidad de un sueño imperecedero.

martes, 20 de agosto de 2013

Do you hear?





Do you hear the people sing?
Singing a song of angry men?
It is the music of a people
Who will not be slaves again!
When the beating of your heart
Echoes the beating of the drums
There is a life about to start
When tomorrow comes!

Combeferre
Will you join in our crusade?
Who will be strong and stand with me?
Somewhere beyond the barricade
Is there a world you long to see?

Courfeyrac
Then join in the fight
That will give you the right to be free!!

All
Do you hear the people sing?
Singing a song of angry men?
It is the music of a people
Who will not be slaves again!
When the beating of your heart
Echoes the beating of the drums
There is a life about to start
When tomorrow comes!

Feuilly
Will you give all you can give
So that our banner may advance
Some will fall and some will live
Will you stand up and take your chance?
The blood of the martyrs
Will water the meadows of France!

All
Do you hear the people sing?
Singing a song of angry men?
It is the music of a people
Who will not be slaves again!
When the beating of your heart
Echoes the beating of the drums
There is a life about to start
When tomorrow comes

sábado, 10 de agosto de 2013

Y de nuevo...

Tal vez suene raro, o absurdo, pero empiezo a sentirlo. Lo que murió se vuelve a despertar. Un sentimiento que consideraba extinto. ¿Qué como lo sé? No, no lo sé, pero creo en ello. Al fin y al cabo, así son las mejores cosas: No son las que sabes, sino en las que crees. Todo a mi alrededor es diferente, como lo fue antaño. Extraño y maravilloso. Dulce e inquietante. Espera, ¿eso es el amor? Creo que si, lo había olvidado. A veces no viene mal recordarlo, y darte cuenta que siempre hay una razón para vivir. A veces no tienes que buscarla, no necesitas buscarla; tal vez ella llegue hasta ti.

lunes, 15 de julio de 2013

Ingenuidad

—    ¿A dónde se fue? —volvió a preguntar el muchacho sin hacer mucho caso a la disculpa—. ¿A dónde se fue Helena?
—    Belmmael habló con ella… —le respondió Ifil, titubeante—. Le encomendó una misión, pero ignoramos cual.
—    ¿Volverá?
Los dos vampiros se intercambiaron miradas.
—    Yo creo que si —le dijo Ifil sin mucho entusiasmo.
Al muchacho no le gustaba como sonaba aquello. Miró a Helmes buscando su respuesta, pero no la encontró.
—    Deberíamos continuar la marcha —apremió este mientras se incorporaba.
—    Hay que pagar —recordó Jennifer.
—    Por supuesto —reconoció Helmes mirando a Ifil.
—    ¿Estás seguro? —le preguntó la vampiresa.
—    Por supuesto, deberías.
—    ¿Y el pacto?
—    Sospecho que ya no nos afecta —Helmes le enseñó una sonrisa.
Ifil se la devolvió.
—    Entonces id saliendo.
Ryke sintió un estremecimiento; Jennifer, por el contrario, se mostró impasible y el chico envidió su ingenuidad.

«En su mundo todavía hay color», comprendió.

sábado, 13 de julio de 2013

En la ciudad dormida

Ya era tarde, y la ciudad dormía. Algún coche deambulaba por la carretera montando escandalo con la música a todo volumen, y algún borracho caminaba por la acera como si fuera un campo de minas. Se toparon con varios grupos de jóvenes que volvían sus cabezas para mirar a Helmes y a Ifil. No era de extrañar: resaltaba a la vista que no eran normales. Tenían una forma de andar rígida y elegante. Sus miradas eran propias de depredadores y no mostraban vacilación alguna. Sus pasos eran seguros, y sus movimientos firmes. Sus ojos reflejaban las luces de las farolas como espejos apantallados de diferentes colores. Sus pálidos y perfectos rostros podrían, como mínimo, producir respeto; probablemente hasta terror en algunas personas. Desprendían seguridad en sí mismos, y hacían que Ryke se sintiera seguro al estar con ellos. No obstante, no bajaba la guardia, pues había visto a Belmmael morir, y cuando ves una persona tan poderosa ser derrotada, te das cuenta que no existe nadie inmortal. La muerte no discrimina.

viernes, 12 de julio de 2013

Quisiera...

Lo se, algo funciona mal; algo en mi funciona mal. Quisiera, pero no podría. Ojala me resultara más fácil, pero se que no solo es por mi culpa. Debe de ser eso, debe ser lo de siempre. Lo que nunca me dejó sigue dentro de mi, impidiéndome seguir adelante. ¿Será verdad? Siéntete orgullosa, aun superándolo, de alguna manera sigues en mi interior como una espina clavada en el corazón, impidiendo que este le pueda pertenecer a otra persona. Gracias.

jueves, 11 de julio de 2013

Adversidades

“Se marchó lejos, muy lejos, y jamás regresará. ¿Cómo cargar con la muerte de aquellos que dieron su vida por protegerte? Intentas seguir adelante, aun sabiendo que no puedes evitar lo inevitable. Sabes que solo es el primero de muchos, lo sabes porque ya lo has vivido. Sientes el deseo de venganza acumularse en tus entrañas, un deseo que se verá frustrado ante las evidentes adversidades del camino. Es entonces cuando te preguntas: ¿Por qué debería luchar?, y una voz en tu cabeza te responde: Por los que aún están vivos”

-Memorias de Sangre y Acero: Vientos Helados.

jueves, 4 de julio de 2013

Los peores temores

Al día siguiente, lo peores temores de Ryke se hicieron realidad:
—    Me voy —le dijo Helena.
El muchacho sintió hormigueos y casi le entró un ataque de pánico. Sus síntomas febriles no habían remitido, y su cuerpo parecía desaparecer poco a poco según pasaba el tiempo.
—    ¿A dónde vas? —logró preguntar sin trabarse la lengua.
—    He de hacer algunas cosas antes de que todo esto acabe —le respondió ella mientras le acariciaba la mano—. No puedo darte más detalles, lo siento.
El pánico le invadió.
—    No, por favor, no me dejes solo —trató de agarrarla fuerte de las manos, pero la fuerza se le escapaba por los poros.
—    Lo siento, de verdad. —El semblante de Helena era triste y nada alentador. Ryke trató de incorporarse, pero solo consiguió erguirse un poco antes de desplomarse de nuevo en la cama. La vampiresa puso sus manos en el rostro congestionado por el terror del muchacho—. Espero que algún día lo entiendas.
—    He de entender muchas cosas, y no me va a dar tiempo. —Ryke hizo un esfuerzo por alzar la voz, pero fue en vano—. No te vayas…
Contra toda súplica, Helena apartó sus manos del rostro de Ryke con una caricia fría y se marchó sin ni siquiera dedicarle una última mirada. El muchacho no quiso aceptarlo, y se levantó tan bruscamente que sintió unas fuertes punzadas en sus articulaciones. Cayó al suelo y se dio de cabeza contra el sillón donde Helena estaba sentada. El mundo de Ryke se oscureció, y el silencio se adueñó de su vida. Sintió que su corazón se convertía en un pozo oscuro y profundo, tan vacío como su alma.
«Se ha ido», se repetía en su mente. Sabía que no volvería a verla, y eso le atravesaba como si le clavaran un puñal al rojo vivo. Se quedó tendido en el suelo, renunciando a seguir luchando, a insistir, a vivir. ¿A quién quería engañar? ¿Cuándo pudo pensar que aquella locura de misión podría tener un final feliz? Belmmael se equivocaba; y ahora todos habían muerto.

miércoles, 26 de junio de 2013

Sueños

—    Algún día entenderás, que todo lo que nos sucede es por una causa mayor —le dijo Belmmael con voz pausada. La chimenea crepitaba débilmente a sus espaldas y la luz proyectaba sus sombras contra la pared completamente blanca a pesar de la oscuridad.
—    ¿Qué clase de causa podría provocar esto? —le preguntó Ryke.
—    Aquella que consigas cuando el destino te brinde la oportunidad.
Ryke mantuvo su mirada perdida en las inquietas sombras de la pared.
—    ¿Y cuándo me maten?
—    No puedes morir —replicó el anciano.
El muchacho se fijó mejor en su alrededor. Se encontraba en una sala grande, sin techo  y con paredes tan lisas y uniformes como las aguas en calma de un estanque. Tanto él como el brujo se encontraban sentados en un par de butacas blancas a espaldas de una chimenea de llamas azules.
—    ¿Estoy muerto? —volvió a preguntar el muchacho.
—    No —Belmmael sonrió—. Aun tienes un papel importante que desempeñar en esta vida.
—    ¿Y por dónde empiezo?
—    Oídos sordos a las falsas promesas —respondió el anciano tras acomodarse mejor en la butaca—. Los hilos de este mundo los mueven las palabras de aquellos que saben usarlas. Las guerras, los enfrentamientos y los asesinatos son solo trucos, artimañas para confundir.
—    Si, Elmeroth parece ser un experto en ello —asintió Ryke—. Las apariencias engañan.
Belmmael asintió.
—    Mucho me temo, mi joven muchacho, que en el mundo en el que te vas a ver inmerso, las apariencias engañan más de lo que te imaginas.
Ryke le miró con asombro.
—    ¿Insinúas que no debo confiar en nadie?.
—    Confía en tus amigos —dijo el brujo—, en los que te quieren. —Hizo una mueca de dolor—. Tal vez en aquellos en los que jamás pensarías confiar.
—    Me lo pones difícil —«Mis amigos se han ido para no volver»
—    El mundo real no es como en las películas. —Sonrió Belmmael.
—    Entonces los malos ganarán.
—    Es posible —asintió el anciano con total naturalidad—. Peros si no hacemos nada ganarán de todas maneras. ¿No te apetece ponérselo difícil?

Ryke le devolvió la sonrisa.

miércoles, 5 de junio de 2013

Los cambios

“Entonces, llega el momento en el que, todo ese mundo escondido detrás del tuyo asoma la cabeza y te envuelve como las nubes que cubren el cielo. Te ves inmerso en una vida completamente diferente a la que pertenecías. La especie humana es una especie de costumbres, en el momento que los cambios se convierten en hechos inevitables, automáticamente se tiene miedo. Los cambios forman parte de la vida, si se temen los cambios, se temen la vida. Y si se teme la vida... ¿por qué habría que vivir?”

lunes, 27 de mayo de 2013

Alma negra

—    ¿Disfrutas de tu última semana de vida? —Los ojos verdes del vampiro brillaron, a pesar de la oscura profundidad que estos contenían.
—    ¿Dónde te has dejado el bozal, Saithor? —se burló Flevian.
El vampiro rubio se detuvo en secó y le dirigió una sonrisa divertida.
—    ¿Crees que defender al mocoso te convierte en una criaturita buena? —le espetó—. Intentas limpiar tu pasado, borrar una mancha que se ha ceñido a tu piel y de la que eres incapaz de desprenderte. Pero es tu naturaleza, eres como yo, no intentes convencerte a ti mismo.
Flevian apartó a Ryke a un lado y se acercó a Saithor.
—    Tal vez consiga librarme de aquella mancha antes de malograrme, la correa no me favorecería—le respondió mientras se acariciaba el cuello.
—    Tejes tu propio destino, tesorero. Y estas utilizando una seda muy mala.
Ambos vampiros se miraron con tanto odio y desprecio como fueron capaces.
—    ¿Sabes lo que te esperará cuando el cuerpo de ese mocoso y el de sus amigos cuelguen inertes por el extremo de una cuerda? —amenazó Saithor, desafiante.
—    La muerte, con toda certeza—dijo Flevian con naturalidad—. Y la absolución a todos mis pecados.
—    Tus pecados te perseguirán vayas al infierno que vayas.
—    ¿Y los tuyos no?
Saithor rio su pregunta en silencio. Miró a Ryke y acercó su rostro al de Flevian.
—    Yo soy el pecado —confesó.

domingo, 26 de mayo de 2013

Mentiras

“Las palabras llegan a ser armas, y las mentiras las balas que estas disparan. Cuando la mentira te rodea debes abrirte paso a través de la maleza con estocadas de la verdad. Da igual cuan espesa sean las malas hiervas de la falsedad, da igual cuan enterrado estés bajo ellas. La superficie es todo lo que te queda. La luz es la única salida.”

miércoles, 22 de mayo de 2013

Los juicios de la muerte


“Es en los momentos más oscuros que se revela la auténtica faceta de la vida. La auténtica cara de las personas. El sabor amargo de palabras huecas y el falso velo descubierto de las promesas realizadas. Te preguntas: ¿Será esto el final?, ¿o solo el comienzo de algo mucho peor? Nadie puede escrutar el azar del futuro, ni discernir el sino de una persona. Todos somos títeres a la merced de la casualidad. A la serie de eventualidades que nos obligan a adaptarnos a las circunstancias que nos rodean. A nuestras elecciones y a las elecciones de aquellas otras personas que repercuten en nosotros. El sendero es más difícil seguirlo en la oscuridad, por eso, tener una mano sincera que sujetar puede marcar la diferencia entre perderse o hallar el camino correcto.”

lunes, 20 de mayo de 2013

Falsas acusaciones


Hubo unos segundos se intenso silencio, hasta que, finalmente, Elmeroth se incorporó y avanzó hasta situarse entre el juez, el acusado y su defensa.
—    Hace casi una semana, el joven huésped elaboró un plan con sus amigos mortales para robarnos ciertas reliquias y tesoros importantes de los que yo le había hablado con anterioridad. Aprovechó las horas altas de la noche para escapar con Belmmael, brujo de Phyrelion que conspiró contra nuestra causa, y que, junto con algunos traidores, intentan arrebatarnos lo que nos pertenece. Tenemos testigos que alegarán que robaron ciertas reliquias de suma importancia, que tramaron planes con traidores, y que asesinaron a Isabella en plena calle de Burgos, bajo la mirada de innumerables civiles mortales. Además, él…
—    Nosotros también tenemos testigos que desmentirán esas falsas acusaciones —volvió a interrumpir Helmes con frialdad.
—    No obstante —volvió a hablar el juez—, este resulta ser un tema bastante grave como para pasarlo por alto. —Se giró dando la espalda a Ryke y miró a los Devictus, que escuchaban todo con atención y en silencio—. Procedan.
Hubo intercambios de mirada, asentimientos y murmullos. Entonces uno levanto la mano, dos, tres, diez. Ryke sintió un sudor frío recorriéndole la espalda. Quince, veinte manos levantadas. Helmes suspiró, Elmeroth enseñó sus colmillos en una sonrisa tan maléfica como sus intenciones.
El juez miró a su alrededor, luego echó un vistazo al muchacho y asintió.
—    El juicio se celebrará en una quincena —anunció—. Se levanta la sesión.

domingo, 19 de mayo de 2013

El reflejo del alma


—    Hay una hermana —dijo con tono siniestro. Ryke no supo decir si lo había exagerado o si el tema de verdad era siniestro—. Otra belleza fría y oscura como una noche de invierno. Son gemelas, Ryke. Idénticas. Solo hay una manera de distinguirlas. —Se señaló los ojos—. La mirada de Helena es primaveral, casi diría que calurosa. Sus ojos te invitan a acercarte a ella, su olor… —sonrió—. Yo diría que sabes de lo que hablo. Su hermana es todo lo contrario: Su mirada es invernal, fría y calculadora. Unos ojos tan azules que temes adentrarte en ellos y perderte en un océano tan hostil como su propia alma.

martes, 14 de mayo de 2013

Chaos isn't a pit

Chaos isn’t a pit. Chaos is a ladder. Many who try to climb it fail and never get to try again. The fall breaks them. And some are given a chance to climb, they cling to the realm or the gods or love. Only the ladder is real. The climb is all there is.

sábado, 4 de mayo de 2013

"Mañana no va a llover"


—    Helmes tenía razón —dijo Ryke casi en un susurro—, estamos atrapados aquí. De un modo u otro nos van a retener. —Se incorporó con un brinco que asustó a Jennifer—. Pero es a mí a quien necesitan, debéis marcharos.
—    ¿Has bebido vino y no me has avisado? —Danny se había erguido en el sillón y le miraba con el ceño fruncido.
—    Lo digo enserio —le espetó Ryke—. Ellos no os quieren a vosotros, no os necesitan. Deberías marcharos esta noche.
Parecía que Jennifer iba a replicar cuando Danny volvió a interrumpir:
—    A Burgos regreso contigo, o no regreso—dijo con una seriedad que Ryke no había visto jamás en su amigo—. Además, ya oíste lo que dijo Belmmael, si nos ven por ahí fuera desprotegidos nos secuestrarían para hacerte chantaje. Has visto muchas películas, Ryke, ya sabes cómo funciona todo eso.
Algo le decía que con Danny tenía la batalla perdida, pero miró a las dos chicas con la misma sugerencia brillando en los ojos. Jessica negó con la cabeza, tan decidida como seria. Jennifer tenía los ojos anegados en lágrimas y también negó con la cabeza mientras contenía el llanto.
—    Tengo miedo de estar aquí —sollozó—. Pero más miedo tendría de dejarte aquí solo.
Aquello fue la gota que colmaba el vaso. Ryke se acercó a ella y la rodeó entre sus brazos.
—    No dejaría que nada malo os pasara —le susurró, entonces la miró con una sonrisa tranquilizadora, a la que ella le respondió con una sonrisa triste—. ¿Sabes?, creo que mañana no va a llover —le dijo mientras le secaba las lágrimas con el pulgar en un gesto cariñoso.

miércoles, 1 de mayo de 2013

Falsas promesas


—    Yo sé que es lo que te ronda la cabeza —dijo Elmeroth tras un breve silencio incomodo —, sé que es lo que te mueve, Ryke. La venganza por una madre asesinada; el amor de una joven belleza, tan pálida como la nieve y tan morena como un cielo nocturno; la leal amistad de unos amigos.
Ryke volvió a mirarle y descubrió que el vampiro tenía una crispante sonrisa dibujada en la boca.
—    ¿Y qué? —dijo con un tono más adusto de lo que pretendía.
—    ¿Quieres que se haga justicia por tu madre?, reclámala. ¿Quieres encontrar el amor en esa joven?, déjame ayudarte. ¿Quieres pasar la eternidad con tus amigos?, pídemelo.  
«Falsas promesas», recordó Ryke.
—    Quédate con nosotros —prosiguió Elmeroth mientras los reflejos morados de sus ojos centellearon —, y todos tus deseos llegaran a su debido tiempo. Quédate, y llegado el momento te convertiremos en uno de nuestros mejores aliados.
—    Me quedaré aquí —comenzó diciendo Ryke, aun con su tono adusto—, hasta que Belmmael me diga lo contrario.
Elemeroth no borró su sonrisa, pero debajo de esta no había felicidad alguna.
—    Por supuesto —dijo mientras torcía la poca sonrisa que le quedaba y se hacía a un lado para dejarle regresar con sus amigos.

domingo, 28 de abril de 2013

Pesadillas


La estancia era oscura, sin ventanas. Unas pocas antorchas la iluminaban con su tenue y titilante luz anaranjada, pero no eran suficientes. Al fondo, una puerta daba a la más espesa negrura que Ryke haya visto jamás. Era una oscuridad sólida que parecía rebosar por la puerta y mezclarse con la luz a su alrededor. El chico no dudó en coger una antorcha y adentrarse entre los tentáculos densos de la lobreguez que emergía de la puerta. Según avanzaba con la luz, las sombras se dispersaban hasta que contempló una estancia vacía, sin cuadros, ni tapices, ni ventanas; solo cuatro paredes lisas y consistentes de color beis.
—    No puedes explorar la oscuridad inundándola de luz —Era la voz de Christine, pero no estaba allí, no había nadie allí.
Ryke miró la antorcha, dubitativo. Salió de la estancia y las sombras volvieron a anegarla como el agua en una piscina. Cuando el chico dejó la antorcha en su sitio, sintió serias dudas de lo que iba hacer.
« ¿Y por qué habría de hacerlo? —pensó—. ¿Por qué querría explorar la oscuridad?»
—    Porque te da miedo —contestó Christine—, y para enfrentarte a tus temores antes debes de conocerlos.
La voz de la vampiresa no retumbaba en la estancia, sino en su mente. Ryke se armó de valor y se acercó a la puerta, donde las sombras le rodearon como una serpiente rodea a su presa. Sintió un extraño cosquilleo allí donde la oscuridad tocaba su piel, y un intenso olor a moho y sangre le atravesó los pulmones. La oscura nebulosidad le engulló y se encontró en medio de una noche sin estrellas, solo y con frío.
—    El miedo es lo que da las fuerzas a una persona para cometer actos de valor —dijo una voz con un eco tan acentuado que la hacía completamente irreconocible
—    ¿Entonces tener miedo es bueno o es malo? —preguntó Ryke a la oscuridad, confuso y desorientado.
—    El miedo es una herramienta que has de aprender a usar, un arma que debes controlar —La voz de Christine seguía sonando clara en su cabeza—. Si has de enfrentarte a tus enemigos no debes de tener miedo, pero si quieres derrotarlos sin que ellos acaben contigo, entonces debes tener miedo. En ocasiones el miedo nos permite hacer esfuerzos inhumanos, esfuerzos que no seriamos capaces de hacer sin su ayuda. El miedo es poderoso, aprende a usarlo y serás más fuerte que cualquier persona o ser de los dos mundos.
Ryke extendió los brazos instintivamente ante  la densa oscuridad y caminó completamente ciego. Lo siguiente que sintió fue una ráfaga de aire tan frío que lo recibió como cientos de espadas; un golpe seco y el suelo desapareció bajo sus pies. La caída libre le hizo despertarse sudoroso y con palpitaciones.

viernes, 26 de abril de 2013

Ante la tormenta...

"¿No lo hueles? Es como el aroma que dejan las diferentes estaciones al transcurrir el año; como el perfume de distintas mujeres acostadas sobre tu cama en las noches desenfrenadas; la fragancia de las diversas flores y hierbas de los jardines estivales. Estamos al borde de una nueva era. Siente su esencia, apelando a los cambios, los desagravios de la tierra, la pérdida de vidas y la petición de una existencia moribunda. Se levantan vientos helados, y cuando lleguen, no habrá quien se refugie de ellos".

viernes, 19 de abril de 2013

Moneda de dos caras


—    Hay una cosa que siempre tenéis que tener en cuenta, muchachos —continuó el anciano—. Toda persona monstruosa fue en algún momento una persona inocente. En alguna parte de su interior continua teniendo esa persona, a vece solo hay que hacérsela ver para que la libere.
«La cuestión es cuánto está enterrada esa persona inocente», habría querido decir Ryke, pero no quería menguar el valor de aquellas palabras alentadoras.
—    ¿Cómo derrotar a una persona así? —preguntó finalmente.
—    La opción más obvia… —El anciano tosió y le dio un trago a su copa de vino—. Seria procurar que sea su propia persona inocente la que acabe con el monstruo.
—    ¿Y si el monstruo es más fuerte? —continuó preguntando Danny al darse cuenta por donde quería ir Ryke.
El anciano hizo como si meditara la respuesta, o tal vez la estuviera meditando de verdad.
—    En ese caso, jóvenes muchachos —dejó la copa—, solo habría una persona que derrotar: El monstruo.

sábado, 6 de abril de 2013

Memorias de sangre y acero


Toda historia sigue una estructura y estética fiel a su género. ¿Cuántas veces se mezclan lo real y lo irreal? ¿Y el pasado y el futuro? La mezcla suele dar una extraña sensación. En ocasiones un singular sabor de boca, pero cuando se logran combinar, el resultado puede ser un manjar exquisito.
¿Y por qué no dar un paso más? ¿Por qué no ir más allá de lo establecido? Combinar dos géneros para lograr algo nuevo, fresco e innovador.
Esta es la historia de Ryke Thunder. Un chico con una vida no más trepidante que la de un pez en una pecera pequeña y opaca. Esa vida se verá repercutida de manera inexplicable por una serie de acontecimientos y desgracias que obligarán a Ryke a aprender a volar y salir de la pecera. Deberá confiar, amar, equivocarse, luchar y enfrentarse al dolor de las peores heridas, tanto del cuerpo como del alma. Deberá tomar decisiones, sabiendo que con un paso en falso, puede causar resultados catastróficos.
Esta es una historia clásica del bien y del mal que esconde un sentimiento. El honor, el amor, la vida, la victoria; son los ingredientes de ese sentimiento. Un sentimiento que aflora a través de la oscuridad y que se encuentra cuando todo parece perdido.
Es una historia para recordar que siempre hay algo por lo que merece la pena luchar: La amistad, el amor y la vida.

jueves, 28 de marzo de 2013

La Ciudad Eterna


Se encontraba en una azotea pequeña, bajo un manto de estrellas. Tenía unas vistas increíbles de Roma. Miró la ciudad y se dio cuenta que también estaba sobre un manto de estrellas más extenso. Las luces de la ciudad resplandecían desde cada rincón, mientras que las estrellas del cielo brillaban pequeñas e insignificantes, como un constante recuerdo de la fútil existencia que era el ser humano.
—   ¿Me extrañabas? —Una dulce voz desde su espalda le arrebató un escalofrió.
—   Ya pensaba que no volver a verte —dijo el chico mientras se giraba para ver el pálido y bello rostro de la chica de ojos verdes.
Helena sonrió y, de poder sonrojarse, probablemente lo hubiera hecho. Se acercó a Ryke con paso tranquilo y delicado.
—   Si fueras inteligente huirías de mí —reprendió con una sonrisa divertida.
Ryke se encogió de hombros y volvió a mirar el horizonte.
—   Puede que prefiera ser un idiota insensato.
Helena no dijo nada y contempló el paisaje a su lado.
—   ¿Sabes por qué estás aquí?
—   ¿En la azotea o en Roma?
—   En Roma —respondió la chica con tono de burla.
Ryke la miró sonriente, pero la sonrisa se le borró rápidamente.
—   Os oí hablar sobre los Diadvocatus. Vampiros que tenían una sede importante escondida en Roma.
—   De donde yo pertenecía.
—   Ya… —Ryke agachó la cabeza—. Eres una vampiresa.
Hubo un breve silencio.
—   Hermoso paisaje, ¿no crees? —dijo Helena que miraba el horizonte con ojos intensos.
—   Lo es.
—   ¿Sabes que a esta ciudad se la conoce también por nombre de “Cittá Eterna”?
—   ¿Y qué significa? —quiso saber el chico. Entonces la miró de nuevo y vio el centenar de luces reflejarse en su piel y en sus ojos.
—   La Ciudad Eterna —respondió ella con una radiante sonrisa.